Presentación

Algunos jóvenes de Valdemorillo se lanzan a la aventura del ínter raíl por Europa. Algunos de ellos nos han propuesto publicar sus experiencias en Valdemorillo.com. No solo nos ha parecido muy bien, sino que desde la web hemos decidido ampliar la cobertura a todo aquel usuario que decida contar su relato de estas o pasadas vacaciones.

Si quieres contarnos tus paseos por la T4 de Barajas, lo guapo que era aquel holandés que te "roneó" en un bar de Playa de Aro, el timo que te hicieron en Estambul, o lo malos que son los conductores de Nápoles, solo tienes que mandar tus "letrillas" a viajeros@valdemorillo.com. Por favor, "buen rollito" que estamos de viaje, y lo breve y bueno, dos veces bueno. Que seáis felices.

lunes, 23 de julio de 2007

Núremberg - Estrasburgo

El sábado nos despedimos de los chavales de Valdemorillo y comenzamos nuestro improvisado viaje a Núremberg. Como está a unos cuantos kilómetros de distancia, tardamos casi todo el día en llegar. Una vez allí, buscamos nuestro albergue, cosa no muy fácil ya que desde el principio se nos había indicado mal y parecía un alcázar medieval. El sitio es una pasada, el casco urbano, rodeado por una muralla con grandes torreones, y las casas del interior están todas adornadas con decoración medieval.

Cansadas por el viaje nos fuimos al albergue a dormir.

A la mañana siguiente, tuvimos que coger varios trenes para poder llegar a Estrasburgo, una ciudad que desde el tren no parece nada bonita, pero que realmente sorprende.

Conseguimos un hotel y nos fuimos a dar una vuelta, dándonos la grata sorpresa de coincidir con un espectáculo de luces que se estaba dando en la catedral. Los focos iluminaban las distintas partes de la catedral al ritmo de la música. Terminado el espectáculo, fuimos dando un paseo por las callejuelas de esta ciudad, también se realizaron juegos de luces a las orillas del canal.

Encantadas con la visita de ayer, hoy hemos decidido verlo a la luz del día, y la verdad es que es igual de bonita de día que de noche. Hemos vuelto a la catedral para verla por dentro y nos ha vuelto a dejar con la boca abierta. Es una catedral de inicios románicos que va adoptando elementos hasta llegar al gótico e incluso al clásico.

Tras esta visita, hemos ido al hotel a buscar nuestros makutos y ahora emprendemos el viaje hacia Berna.

Caminante no hay camino, se hace camino al andar y mañana un poco mas.